Objetivo
Observar que elementos flotan o se hunden en el agua.
Materiales
Un recipiente grande y transparente, agua, piedras, monedas, hojas, tapones de corcho, lápices, una pelota de playa, un globo y una esponja.
Procedimiento
Llenaremos el recipiente de agua y reuniremos a los niños alrededor de la mesa. Pondremos los objetos encima de la mesa y animaremos a los niños para que se acerquen a coger un objeto. Antes de ponerlo en el agua trabajaremos con hipótesis y les preguntaremos:
Llenaremos el recipiente de agua y reuniremos a los niños alrededor de la mesa. Pondremos los objetos encima de la mesa y animaremos a los niños para que se acerquen a coger un objeto. Antes de ponerlo en el agua trabajaremos con hipótesis y les preguntaremos:
Resultado y explicación
Las hojas, los tapones de corcho, los lápices, la pelota de playa, la esponja y el globo flotarán. En cambio, las piedras y las monedas se hundirán.
Las hojas, los tapones de corcho, los lápices, la pelota de playa, la esponja y el globo flotarán. En cambio, las piedras y las monedas se hundirán.
Los elementos flotan debido a que son menos densos que el agua, ésta ejerce fuerza ascensional sobre ellos y los mantiene a flote. Los que se hunden lo hacen por ser más densos que el agua y la imposibilidad de ésta de retenerlos.
Propuestas
Este experimento se puede realizar también con frutas u otros alimentos para así descubrir cuales flotan y cuales no. Puede ser el inicio para fomentar la alimentación saludable.
Podemos hacer un barquito con media cáscara de nuez, plastilina y una vela con un palillo mondadientes y una bandera pegada.
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